
Esta mezcla es fragante y su marcado aroma floral se combina con las notas adulzadas y frutales de las frambuesas. El Oolong usado como base es uno de los secretos mejor guardados de la provincia de Fujian, en China, pues es de una delicadeza exquisita y muy inusual. Aunque es suave y delicado, a su vez es robusto y tiene carácter muy agradable. El toque final lo aportan las notas altas de los pétalos de rosa, y contribuyen con un interesante aporte a la deliciosa complejidad de esta mezcla.